Las lesiones por pólvora, intoxicación por fósforo blanco y consumo de licor adulterado con metanol, han demostrado un aumento en su incidencia en la temporada decembrina y año nuevo. Dichos casos están relacionados directamente con la fabricación, almacenamiento, transporte, comercialización y manipulación del uso inadecuado de pólvora pirotécnica, lo que afecta no solo la integridad física y emocional de las personas, que en su mayoría son menores de edad, sino que también produce pérdidas sociales, económicas y ambientales.
La atención médica ante la sospecha de intoxicación por fósforo blanco (ingesta de martinicas, totes, triquitraques, diablitos entre otros) y por licor adulterado con metanol debe ser inmediata, teniendo en cuenta las características de su progresión y la posibilidad de que este tipo de condiciones puedan conllevar a un desenlace fatal.
De acuerdo con el reporte de la secretaría de Salud municipal, el periodo comprendido en los años 2020-2021, concluyó con un balance de 5 personas lesionadas por uso de pólvora pirotécnica, 3 de ellos adultos y 2 menores de 18 años; mientras que en el 2019-2020 se presentaron 7 casos, 2 de ellos menores de edad y 5 adultos.
Por medio de la asistencia técnica del Ministerio de Salud y Protección Social, adjunta en la circular N.56, en colaboración con las dependencias tanto locales como departamentales de salud y las ESE municipales, se brindan los lineamientos que deberán cumplir en la vigilancia intensificada que va desde el 1 de diciembre hasta el 15 de enero de 2022.
Esta asistencia técnica, promueve la preparación en cuanto a las acciones de vigilancia intensificada de navidad y fin de año con el fin de dar respuesta oportuna a través de las instituciones hospitalarias y realizar la notificación inmediata de los casos que se presenten.