Por comunicaciones OMGERD.
Mediante Circular 35 la UNGRD, recuerda algunos lineamientos de preparación para la respuesta, que permitirán enfrentar las emergencias ocasionadas por los incendios de cobertura vegetal y se reitera la alerta para las regiones Andina, Pacífica y del Caribe.
- Identificar los sectores urbanos y rurales de mayor susceptibilidad de incendios de cobertura vegetal (como bosques, cultivos, áreas de potrero), y evaluar los efectos que puedan presentar al entorno.
- Vigilar de manera especial las situaciones que puedan generar incendios en zonas forestales, como las fogatas, arrojar colillas encendidas y la presencia de elementos combustibles como botellas y vidrios que puedan focalizar la radiación solar y generar fuego, las altas temperaturas y las actividades del ser humano son las principales causas de los incendios de cobertura vegetal.
- Identifique las zonas cuyas características geográficas favorecen la probabilidad de impacto sobre la producción agropecuaria y la conservación ambiental (ejemplo: zonas agrícolas susceptibles a sufrir daños por las altas temperaturas, zonas de importancia de ecosistemas susceptibles a la formación de incendios forestales), cuya probabilidad de ser afectadas ante eventos de este tipo es alta. En función de ello, establezca estrategias de preparación; respuesta y recuperación.
- Una vez identificados los riesgos, verifique su capacidad de respuesta comunitaria en materia de elementos (herramientas) y recurso humano, que pueda servir de apoyo en algún momento para el control de incendios forestales u otra acción asociada con la temporada de menos lluvias.
- Evitar realizar quemas de basura y material vegetal, o arrojar elementos inflamables como fósforos, combustibles, colillas de cigarrillo, vidrio o plástico que puedan generar incendios de la cobertura vegetal.
- Si su entorno es susceptible a incendios de cobertura vegetal, mantenga a mano herramientas para extinción de incendios forestales: (palas, azadones, batefuegos, machetes)