Con la llegada de las festividades, es importante recordar que, la pólvora no solo representa un peligro para los seres humanos, sino también para los animales, quienes sufren efectos adversos debido al ruido, las sustancias químicas y el estrés causado por la explosión de estos artefactos.
Los animales, especialmente aquellos con una audición más sensible como los perros, gatos y aves, reaccionan de manera extremadamente negativa ante los fuertes ruidos generados por los fuegos artificiales. El ruido ensordecedor puede causarles pánico, ansiedad y desorientación. Algunos animales, especialmente perros, muestran signos de miedo, como temblores, jadeo excesivo, ocultamiento y comportamientos destructivos.
El estrés que los animales experimentan durante los eventos pirotécnicos puede tener efectos duraderos. Los animales sometidos a este tipo de experiencias a menudo desarrollan trastornos de ansiedad crónica, lo que puede influir en su comportamiento a largo plazo. Los animales que ya padecen de alguna condición médica o que son más sensibles pueden ver agravada su situación, corriendo el riesgo de sufrir complicaciones adicionales.
Por eso desde la Alcaldía de Armenia se hace un llamado a la ciudadanía para recordarles que la pólvora, no solo es una amenaza para el medio ambiente, sino también para la salud y el bienestar de los animales.