Como municipio de primera categoría, Armenia obtuvo un Índice de Desempeño Fiscal (IDF) de 62,23 puntos, 6,37 puntos por encima de la media nacional, hecho que la destaca por su fortaleza tributaria y la ubica en el primer lugar en el Eje Cafetero, por encima de Pereira (62,15), y con una ventaja más amplia sobre Manizales (59,59) e Ibagué (52,42).
En comparación con las demás capitales del Eje Cafetero, Armenia lidera el desempeño fiscal, por la eficiencia administrativa y la solidez de las finanzas públicas locales, que mantienen a la ciudad como referente de gestión responsable y autonomía tributaria en la región, reflejo de reflejo de una estructura tributaria sólida y una fuerte capacidad de generación de ingresos propios.
- En 2024, el municipio consolidó su fortaleza fiscal al recaudar $250.767 millones en recursos propios, gracias a una gestión tributaria eficiente y en crecimiento.
- El impuesto predial aportó $80.657 millones (36,7%), con un aumento del 27,2% frente a 2023, mientras que el impuesto de industria y comercio (ICA) alcanzó $72.354 millones (32,9%).
- Esta diversificación de ingresos confirma la solidez de la estructura tributaria y el compromiso ciudadano con el desarrollo local.
El secretario de Hacienda, Yeison Andrés Pérez Lotero, destacó que estos resultados reflejan el compromiso de la Administración Municipal por mantener unas finanzas públicas sólidas y orientadas al desarrollo. “Desde el Gobierno del alcalde James Padilla García impulsamos una gestión responsable y transparente, centrada en la eficiencia del gasto, el fortalecimiento del recaudo y la inversión con sentido social, para consolidar a Armenia como una ciudad con equilibrio financiero y capacidad para ejecutar proyectos estratégicos”, afirmó el funcionario.
- En materia de sostenibilidad, Armenia registra un endeudamiento del 31,8%, indicador que, si bien representa un desafío, se mantiene dentro de márgenes manejables para una capital departamental.
- El ahorro corriente del 48,6% respalda su estabilidad y abre espacio para fortalecer la inversión futura. El gasto de funcionamiento alcanzó $89.191 millones (47,5%) de los ingresos corrientes de libre destinación, nivel cercano al límite legal para municipios de categoría 1.
