Debido a que los niños y niñas son uno de los grupos con mayor riesgo de contraer enfermedades transmitidas por alimentos (ETA), la Secretaría de Salud capacitó 78 madres comunitarias cuyabras en aspectos ligados a la prevención de riesgos alimentarios.
“Les brindamos herramientas sobre cómo identificar alimentos adulterados y alterados, se socializan peligros por el consumo de ciertos alimentos y bebidas, los factores de riesgo de las ETAS y se les brindaron algunas recomendaciones que pueden tener en cuenta a la hora de hacer la compra y un consumo seguro de alimentos y bebidas”, indicó Noralba Oviedo, enfermera de la Secretaría de Salud.
Prevención
- Dar lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida y complementaria entre los 6 meses y los 2 años.
- Lavar manos frecuentemente con agua y jabón, en especial, antes de preparar, servir o consumir alimentos, después de ir al baño, después de cambiar un pañal, después de tener contacto con mascotas, al llegar a casa.
- Asegurar el esquema de vacunación completo.
- Consumir siempre agua segura, es decir, hervida por cinco minutos, mantenerla tapada en un recipiente limpio y usarla en el menor tiempo posible. No consumir bebidas de las que se desconoce su modo de preparación.
- Usar agua hervida para el lavado y preparación de alimentos y bebidas (incluyendo el hielo).
- Mantener y conservar separados (preferiblemente en recipientes con tapa) los alimentos crudos, los cocinados y los que están listos para comer.
Signos de alarma
- Se ven los ojos hundidos.
- Las deposiciones son muy líquidas y frecuentes en un mismo día.
- Bebe ansiosamente los líquidos que se le ofrecen.
- No puede mamar del seno.
- Vomita todo o presenta cuatro episodios de vómito en las últimas cuatro horas.
- Orina poco o deja de orinar.
- Aparece fiebre que no tenía antes.
- Aparece sangre en las heces.
- Convulsiona.
- Se ve somnoliento o de difícil despertar.