Los operativos de control a establecimientos dedicados a la compraventa de chatarra forman parte de las acciones dispuestas por el alcalde de Armenia, José Manuel Ríos Morales, y el consejo de gobierno de la capital como estrategia para combatir algunas modalidades delictivas que tienen como punto final la comercialización de elementos robados.
La actividad policial que se hace con el acompañamiento de la Secretaría de Gobierno del municipio se dirigió a las llamadas popularmente chatarrerías para efectuar un registro minucioso dirigido al hallazgo de materiales que son de uso exclusivo de las empresas de servicios públicos y particularmente en lo relacionado a tapas de medidores de agua y de alcantarillas.
Estas acciones delictivas, que pretenden ser perseguidas por parte de las autoridades, han causado pérdidas millonarias a entidades oficiales como las Empresas Públicas de Armenia, generando, además, riesgo para peatones y vehículos, aparte de la considerable pérdida del preciado líquido.
La Policía Quindío reportó el cierre de 2 establecimientos que estaban violando las normas vigentes sobre la materia.
En Armenia existe un importante número de negocios dedicados a esta actividad, cuyos empresarios deben conocer las disposiciones de ley que prohíben claramente la comercialización de estos elementos.